martes, 7 de julio de 2009

Ayer lo tenía a él. Sabía que quería desligarse de toda clase de compromiso. Sabía que se iba a ir a bariloche. Sabía que había estado enamorado de otra. Pero lo tenía, y elegí creer en sus palabras. En sus besos en el cuello. En sus abrazos.

Ayer tenía amigas. Un grupo de ocho inseparables contra todo. Pero tras períodos de interminables lágrimas comprendí que no era como yo pensaba. Que a veces la gente no es como uno cree, aunque duela y mucho.

Ayer tenía amigos, tenía gente en la cual me apoyaba y sabía que siempre podía contar con ellos incondicionalmente. Tenía su confianza, su cariño, su amor.

Ayer pensaba, que la gente que uno elegía era para toda la vida, pero después de tantos golpes y desepsiones de a poco voy aprendiendo que nada es para siempre. Pero a pesar de que aprendí, que me caí y me volví a levantar y después caí de nuevo, HOY comprendo que día a día me voy a enojar, día a día voy a perder gente que quiero, día a día voy a extrañar a gente que tuve y ya no tengo, día a día voy a llorar... La vida es complicada. No se si estoy preparada para entenderla.

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